Concurso ‘Las nueve y cuarenta y tres’
21/07/2017
Moscú, principios de siglo XX. La matriarca de la familia Petrova fallece y es enterrada por deseo propio con un valioso joyero de oro y diamantes que heredó de su madre. Poco tiempo después, la música del joyero comienza a escucharse puntualmente cada noche en el salón de la casa, a las nueve y cuarenta y tres.
La hija mayor de la familia, Antonina Petrova, aconsejada por su sirvienta española, decide recurrir a los servicios de un parapsicólogo español de renombre en toda Europa. Convencida, además, de que su madre hace sonar el joyero porque solicita una reconciliación póstuma con su hija menor, Antonina decide invitar a su hermana para conseguir el descanso eterno de su madre.
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